La anunciada venta de Isagen, cuya subasta está prevista para el 13 de enero, no solo ha generado alarma en el sector eléctrico, en sectores productivos, laborales, sindicales y ciudadanía en general, sino que, además, ha puesto en ‘jaque' a la denominada Unidad Nacional.

Diferentes sectores políticos han expresado su rotundo rechazo a la pretendida venta, advirtiendo lo inconveniente que resultaría para el país.

“La imprudencia de acelerar la venta puede ser catastrófica para el Estado y los intereses ciudadanos”, sostiene el Partido Liberal, encabezado por Horacio Serpa Uribe, quien ha expresado su férrea oposición a la venta de Isagen.

Para el liberalismo, Isagen constituye un activo estratégico para la Nación, caracterizándose por ser una empresa bien administrada y que produce utilidades. Por ello no comparte el promovido dilema del Gobierno: “Isagén o carreteras”.

Por su parte, el Partido Alianza Verde, en cabeza del senador Antonio Navarro, también asegura que Isagen es un activo estratégico del Estado colombiano, “por lo cual hemos usado y seguiremos utilizando todas las herramientas legales a nuestro alcance para evitar que la privatización prospere”.

Entre tanto, el senador Jorge Robledo, del Polo Democrático, sostiene que “a Isagen no la venden por ser mala empresa sino buena Sus utilidades presentes y futuras son excelentes. Eso se sabe. Superiores a vías. Con inflación y tarifas subiendo al 6%, ventas de compradores de Isagen casi se duplicarán. Acción está subvalorada en $500. MinHacienda no puede decir que los créditos que harán con la plata de Isagen rentarán más y serán más seguros que la actual inversión. Privados no invierten en obras de generación que Isagen sí hace por su carácter público. Se sabe que privados rehuyen ciertas inversiones. Privatización de Isagen fortalecerá el oligopolio de generación eléctrica y ello significa mayores tarifas y más malos tratos a usuarios. Extranjeros exportarán utilidades de Isagen Y en año 7 por contrato podrán residenciarla en el exterior y no pagar impuesto de renta aquí”.

A estas figuras de estos partidos se suman 80 senadores y representantes, quienes le advirtieron a las dos firmas que presentaron garantía de seriedad de oferta, BRE Colombia Investments L.P., del fondo de inversión canadiense Brookfield Asset Management y el Consorcio del Pacifico, de la empresa de energía chilena Colbun, su oposición a la venta de Isagen.

Entre los congresistas se encuentran: Alberto Castillo Salazar, Senén Niño, Marco Anibal Avirama, José Obdulio Gaviria, Iván Duque Márquez, Alvaro Uribe Vélez, Ruby Thania Vega de Plazas, María del Rosario Guerra, Ernesto Macías Tovar, Fernando Araujo, Everth Bustamante, Doris Vega, Alexander López Maya, Lido García Turbay, Edison Delgado, Claudia López, Luis Fernndo Velasco, Iván Cepeda Castro, Angela María Robledo, Angélica Lozano, Jorge Iván Ospina, Jorge Prieto, Carlos Felipe Mejía, Paloma Valencia, Susana Correa, Paola Holguín, Jaime Amín Hernández, Daniel Alberto Cabrales, Luis Evelio Andrade, Mauricio Aguilar, Sofía Gaviria Correa, Viviane Morales, Guillermo García, Guillermo Antonio Santos y Oscar Ospina.

Como consecuencia de este rechazo a la venta de Isagen, congresistas que forman parte de la Unidad Nacional han expresado su disposición de apartarse de la misma en caso que el Presidente Juan Manuel Santos persista y haga efectiva la subasta.

Este hecho político pone en entredicho la coalición de Gobierno que ha venido respaldando las acciones del Presidente Santos.

Lo que llama la atención es la posición asumida por algunos congresistas frente al tema. Por ejemplo, el senador atlanticense Efraín Cepeda Sarabia, quien recientemente expresó su apoyo al Gobierno frente a la crisis eléctrica, cuando, precisamente, el país entero estaba reclamando acciones del estado. Luego se retractó ante la avalancha de críticas. Y ahora aparece como férreo defensor de la venta de Isagen.

Aun así, la decisión del Partido Liberal se marginarse de la Unidad Nacional, le restaría apoyo al Presidente para sacar adelante sus iniciativas en el Congreso, contando apenas con un liviano respaldo del Partido Conservador, La U y Cambio Radical, a pesar que no todos los militantes de estas tres colectividades están a favor de la venta.

Desde la misma Isagen también se escuchan voces de rechazo. Según Sintraisagen, sería un grave error la venta de la generadora de energía.

“Ni con riesgo de racionamiento el Presidente Santos reflexiona. Quiere empezar mal el 2016 vendiendo Isagen, patrimonio Nacional. El Gobierno Nacional continúa cometiendo errores, seguirá entregándole lo público a las multinacionales”, señala la organización sindical.

Un análisis de la empresa Isagen muestra su exitosa gestión: las centrales aportan aproximadamente el 16% de la energía que el país necesita; es un importante actor en el sector energético colombiano, siendo la segunda generadora del país y operando la central de generación más grande del territorio nacional; cuenta con un fuerte y diversificado portafolio de activos; sus resultados financieros muestran utilidades crecientes en los últimos años; sus estados financieros reflejan una alta liquidez y flujo de caja, además de una sólida posición competitiva como activo financiero con proyección internacional; desarrolla un ambicioso plan de expansión con el objetivo de duplicar la capacidad de generación actual en el mediano plazo, además de establecer un Modelo de Gestión con altos estándares de responsabilidad empresarial y Gobierno Corporativo.

En los últimos años los ingresos operaciones de Isagen han pasado de $1 billón 465.300 millones en 2010 a $2 billones 329.620 millones en 2014. En el primer semestre de 2015 los ingresos alcanzaron $1 billón 319.190 millones.

Igualmente, las utilidades netas han pasado de $409.776 millones en 2010 a $436.583 millones en 2014. En el primer semestre de 2015 la utilidad neta fue de $211.723 millones.

Por todas estas consideraciones, los interrogantes que surgen de trabajadores y partidos políticos y ciudadanía en general, son: ¿Para qué vender las acciones que la Nación tiene en Isagen? ¿Es necesario? ¿Es prudente? ¿Es conveniente? ¿Se va a vender la gallinita de los huevos de oro? ¿Se acaba la Unidad Nacional?